viernes, 7 de diciembre de 2012

Adiós y gracias;

¡Boom-Boom! Eso es lo que oigo cuando le veo, cuando le veo aparecer a la vuelta de la esquina. Justo en esta calle, nos dijimos que estaríamos juntos para siempre. Pero no fue así, él se fue a otro camino y en el mio, dejó numerosas huellas que aún no se han borrado, y no se borrarán fácilmente mientras le tenga a mi lado. Que sí, que le quiero, pero no le espero. No espero a que vuelva. Y sí, ya se me han acabado las esperanzas, dicen que es lo último que se pierde. Y yo ya las he perdido. Ahora solo digo, Adiós y gracias.